Catequesis: La Cuaresma nos llega ...

La Cuaresma tiene cinco domingos más el Domingo de Ramos, acá te compartimos, desde ya, las lecturas de cada domingo para que aproveches estas reflexiones en cada semana de la cuaresma.

• Primer Domingo de Cuaresma: 22 de Febrero de 2015

Lectura del Evangelio de Marcos 1, 12-15. Se dejaba tentar por Satanás, y los ángeles le servían. Conversión y creencia. La Cuaresma conduce a la Pascua. Dios después del diluvio estableció un pacto con Noé. La creación, una vez lavada y purificada, volvió a verdecer y se lleno el universo de color y de esperanza (Gén 9, 8-15). El bautismo, prefigurado proféticamente en el diluvio, purifica y lava, transmite vida y gracia en virtud de la resurrección de Cristo (1 Pe 3, 18-22). En esta perspectiva de purificación y de renacimiento a una nueva vida, Jesús nos invita a la conversión y a creer en el Evangelio.

• Segundo Domingo de Cuaresma: 1 de Marzo de 2015
Lectura del Evangelio de Marcos 9, 2-10. Este e mi Hijo amado.
Tres montes: Moria, Tabor y Calvario. La liturgia de hoy presenta tres montes: Moria, Tabor y Calvario. Cada uno tiene su significado y contenido. La fe de Abrahán es puesta a prueba al sacrificar al hijo de la promesa en el monte Moria. Dios ve la obediencia del Patriarca y hace que un cordero sea sacrificado en vez de Isaac (Gén 22, 1-2. 9-13. 15-18). El otro monte es el Tabor. Jesús es transfigurado y el Padre exhorta a todos a escuchar la voz de su Hijo, que camina hacia la muerte (Ev.). No se menciona expresamente el monte del Calvario en el texto paulino, pero se habla de la muerte de Jesús. Por su muerte la humanidad se ha salvado (Rom 8, 31b-34).

• Tercer Domingo de Cuaresma: 8 de Marzo de 2015
Lectura del Evangelio de Juann 2, 13-25. Destruid este templo, y en tres días lo levantaré.
La ley, el templo y la sabiduría de Dios. Las lecturas del presente domingo se centran en la ley de Dios. El Decálogo del monte Si- naí es la ley mosaica, establecido por Dios a su pueblo (Éx 20, 1-17). Jesús, en el marco del templo de Jerusalén, actúa con autoridad y declara que él es el nuevo y verdadero templo (Ev.). Los cris- tianos, como Pablo, predican a Cristo crucificado. Él es la ley, el templo y sabiduría de Dios ( 1 Cor 1, 22-25)

• Cuarto Domingo de Cuaresma: 15 de Marzo de 2015
Lectura del Evangelio de Juan 3, 14-21. Dios mandó su Hijo al mundo para que el mundo se salve por él.
Dos libertadores. Ciro, rey de Persia, y Cristo, Rey de reyes, son los que liberan al pueblo de Dios. Cada uno a su modo y a su estilo. Israel, purificado de sus pecados en el exilio, regresa a su patria por decreto de Ciro que les concede la libertad ( 2 Crón 36, 14-16. 19-23). Jesús, el otro libertador, no ha venido a condenar sino a salvar. Él fue el estandarte levantado en medio del mundo para salvarlo (Ev.). El amor de Dios al hombre es tan grande, que lo ha librado gratuitamente por su Hijo (Ef 2, 4-10).

• Quinto Domingo de Cuaresma: 22 de Marzo de 2015

Lectura del Evangelio de Juan 12, 20-33. Si el grano de trigo cae en tierra y muerte, da mucho fruto.
La muerte, principio de vida. Hoy las lecturas se centran en la nueva Alianza fundamentada en el misterio de Cristo, muerto y resucitado. Jeremías anuncia una nueva Alianza entre Dios y el pueblo; alianza escrita en el corazón y no en tablas de piedra (Jer 31, 31-34). Jesús instaura la nueva Alianza que está fundamentada en su misterio pascual, simbolizada en el grano de trigo. La nueva Alianza exige muerte y vida, y pide amor y servicio (Ev ). Cristo, sufriendo, se convierte en el autor de la salvación (Heb 5, 7-9).

• Domingo de Ramos: 29 de Marzo de 2015
Lectura del Evangelio de Marcos 14, 1-15, 47. Llevaron a Jesús al Gólgota y lo crucificaron.
La vida del “Siervo”. El Domingo de Ramos es el pórtico de la Semana Santa. La liturgia de la bendición y de la procesión anticipa el triunfo de Cristo, el Rey pacífico y humilde que entra en la ciudad de Jerusalén aclamado mesiánicamente. El “Siervo” está siempre dispuesto a escuchar la palabra de Dios y a proclamarla en favor de los oprimidos a pesar de padecer él mismo la persecución (Is 50, 4-7). Jesús, el Siervo, proclama su mensaje, es perseguido y muere en la cruz para liberar al hombre del pecado (Ev.). En la segunda lectura se proclama el himno en el que Pablo habla de la humillación y de la glorificación de Jesús sobre todo nombre (Flp 2, 6-11).